martes, 28 de octubre de 2014

No comunicación entre familias y educadores, lo que está sucediendo ahora

La comunicación entre las familias y los educadores de los niños es un tema muy importante porque ayuda a todos los protagonistas de la educación de los niños a aprender, a crear confianza y vínculos, lo que beneficia positivamente el desarrollo de los niños y avances en la escuela.

¿Por qué hablo de este tema? 
Pues porque en estos momentos, la comunicación con los educadores de la escuela donde llevo a mi hija, creo que está fallando. A todos los niveles y además de un lado para otro y viceversa.

Voy a intentar explicarme para que lo entendáis.

Cuando empezó Lola la escuela con 7 meses, tuvimos una entrevista con la que iba a ser la educadora de Lola, donde le contamos cómo era la niña, nuestras rutinas, horarios, su carácter, sus puntos fuertes y los débiles. Nuestras preocupaciones, nuestras inseguridades también fueron temas que tratamos. Y reconozco que su educadora se tomó su tiempo para escucharnos y para ella explicarnos también cómo se iban haciendo las cosas. 
Durante el día a día, usábamos una libreta donde nos contaba de manera resumida, sus cacas, sus siestas (la duración de las mismas), su comida, la cantidad de los alimentos que comía y además algo que me encantaba eran las conquistas que hacían. Por ejemplo, hoy ha ido recorriendo de pie la sala y ha llegado hasta el cambiador. 
Además esta libreta, la usábamos para por parte de nosotros comentarle, si Lola había dormido bien, si la notábamos algún cambio. 
Pero además de la libreta, en la entrada o la salida, teníamos unos minutos para hablar con su educadora para comentar todo esto. 
Además de este sistema, cada 3 meses su educadora nos reunía a todos los padres y nos contaba a las familias, a través de fotos que hacían a los niños, sus rutinas, conquistas, actividades y juegos. Esa era la manera de trasmitir todo. En esas reuniones más de uno y más de dos, los padres, nos emocionábamos viendo esos avances, gestos y experiencias de nuestros hijos.

Esta forma de funcionar, en el fondo una comunicación de éxito,  exige por parte de los educadores y las familias, compromiso. La implicación de ambas partes, para que la experiencias vividas por nuestros hijos estén llenas de cosas positivas. Si nuestros hijos sienten que nosotros, los padres y madres, tenemos confianza en las personas con quien les dejamos, todo funciona. Los niños, familias y educadores, construyen un círculo de confianza y de respeto, donde cualquier duda, inquietud por todas partes se dan respuesta y se solucionan. Nunca he tenido ningún problema, siempre me he sentido escuchada e invitada a cuestionar cualquier cosa.




Ahora ocurre otra cosa.

Empieza el curso, con educadores nuevos, empresa nueva que gestiona la escuela infantil Las Nubes. Y no tenemos una reunión personal con la educadora de nuestra hija, aunque aparezca en la normativa que la deben hacer. La información en la primera reunión general de todos,  fue escueta y generó cierta desconfianza en las familias, la primera yo.

El curso empezó el día 4 de septiembre y hasta el día 1 de octubre, no nos contaron en qué iba a consitir el día a día, ni las líneas generales en las que se basa su metodología pedagógica. Desde el día 4 de septiembre siempre he mostrado mi interés por mantener una tutoría con la educadora de mi hija. Simplemente porque quiero conocerla, que nos conozca y que a través de esta reunión se establezca un punto de partida para crear esa confianza que necesito para que quedarme tranquila cuando dejo a Lola en la escuela. 

Reconozco que antes de que nos facilitaran esa libreta, ella me sugirió que en un cuaderno cualquiera podríamos contarnos qué tal va haciendo las comidas Lola, porque en esos momentos era lo que me preocupaba. Lo estuvimos haciendo durante un par de semanas, y ya nos entregaron la nueva libreta. Lola mejoró considerablemente el tema de las comidas. O quizás que nosotros nos relajamos y Lola lo notó.

El tema es que la entrada del aula, está llena de pizarritas donde escriben:  hemos hecho esto y esta semana haremos lo otro.  
Nos pidieron colaboración y me ofrecí, pero nunca me dijeron para qué. Y mi nombre se borró de la lista y así quedó la cosa. Y pregunto y sus respuestas son que otros harán cosas. 
La dinámica general de la escuela no invita a las familias a ser escuchadas, sino todo lo contrario

Esta situación me hace sentir incómoda, incómoda cuando recojo a mi hija, cuando la llevo a la escuela, porque no siento que sea escuchada, que pueda preguntar. Siento que cuando lo hago, la educadora se siente incómoda y me responde a la defensiva. Con lo cual esto produce un mal estar en ambas partes. Pero el problema es que no hay tiempo, no hay tiempo de hablar, porque a las 16:00 horas, se van y no hay unos minutos que a veces harían que las cosas fueran más sencillas, para los educadores y para los padres. Para los educadores porque ellos podrían expresarse y las familias podríamos conocer un poco más qué hacen los niños en la escuela y cómo están.

La comunicación es necesaria, en cualquier relación de pareja, de familias, de profesionales, pero en este caso me parece la base de todo, la base de la confianza y del respeto. Normalmente la falta de comunicación, los malos entendidos, suelen ocasionar que las relaciones se rompan o que se generen conflictos.

Espero que este tema ayude a reflexionar sobre ello.

Me gustaría que me contarais si os sentís escuchados, si sentís que haya esa comunicación con el educador de vuestros hijos, si pensáis que es importante y cualquier opinión me gustaría escucharla. Prometo contestar los comentarios. Es un tema super importante y necesario, para que todo salga bien.


8 comentarios:

  1. Partiendo de que es gente sin formación universitaria que sólo ha hecho un modulito, qué te puedes esperar. A mí lo de dejar a mis hijos con una persona que no es maestra no me gusta mucho. En el cole al que van mis gemelos hay también maestros y eso me deja más tranquila, aunque parezca una tontería. No me siento a gusto dejándolos con educadoras. Para limpiar culos y dar potitos están bien, pero para el resto prefiero a una profe, aunque suene rotundo.

    Bego

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    1. Bego en el caso de estos educadores parece ser que son maestros. Pero esto pasa y no me gusta

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    2. Hoy en dia no es facil aprobar un modulito, tal como dices... discrepo esta comparacion tan odiosa, conozco casos de todo tipo... gente con mucha titulacion con inexperiencia en el trabajo, gente no titulada con facultades sobradas, gente titulada y con experiencia. La vida laboral es complicada y competitiva en cualquier sector y las diferencias las marcan la gente con experiencia que les gusta su trabajo. Por favor un respeto con los modulitos, siempre he opinado que criticar es facil pero sacar el trabajo diario y la lucha dia tras dia es lo que marca las diferencias.

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  2. a nosotros nos pasa igual, creo que ya te lo he dicho alguna vez. como digo lo que pienso (sin decirlo a malas, pero lo digo) noto claramente que me han puesto la cruz.

    las primeras dos semanas lo llevé peor, luego pensé que mientras victor fuera y volviera contento, pues que no me compensaba darle más vueltas por mi propia salud mental, al fin y al cabo yo puedo permitirme el lujo de no llevarlo cuando me dé la gana que para eso estoy en casa por las mañanas, pero me gustaría muchísimo que la situación fuera otra. todos seríamos mucho más felices.

    yo tampoco entiendo por qué contestan con evasivas y se ponen a la defensiva a la primera de cambio aunque sospecho que es por algún complejo o inseguridad que tienen ellos con respecto a lo que hacen o a su forma de enseñar. esta misma forma de actuar la he visto entre mis propios compañeros: los que no están seguros de lo que hacen, no dejan entrar a nadie en sus clases, hay mucho secretismo y cualquier comentario se lo toman como una crítica personal, sin embargo yo nunca me planteé cerrar la puerta, siempre he dado las clases con la puerta abierta y no me importa quién entre, un padre, un inspector o el alcalde, porque estoy lista para contestar a cualquier pregunta y tengo claro por qué hago lo que hago.

    esperemos que vuestro caso mejore. yo con el mío ya no tengo esperanzas pero lo tengo asumido.

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    1. Gracias Bego por tu comentario, me parece que tu razonamiento es super lógico y que sus inseguridades se trasforman en ese secretismo, allá ellos, en vez de enriquecerse y aprender, son cada vez más mediocres esos maestros y educadores. Qué pena!!! Menos mal que existe gente como tu que busca que sus alumnos aprendan. Un beso Bego, eres un cielo

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  3. Estoy completamente de acuerdo contigo. Por suerte para nosotros nuestro caso es el contrario. En la escuela infantil donde llevaba el año pasado a Peque no había comunicación ninguna. A los niños se les "soltaba" y se les "recogía" en la puerta, con apenas un saludo de intercambio, sin tiempo para nada más.
    Llamando por teléfona era imposible dar con su profesora o con la directora del centro y no teníamos otra vía (el correo no lo leían y no tenían más modo de relación)
    Finalmente, quité a Peque de esa escuela, porque no le veía feliz y no conseguía hablar con ellas para tratar las inseguridades que tenía como madre acerca de cómo se encontraba mi hijo allí.
    Ahora estoy encantada con el centro donde le llevamos. Por la mañana no podemos entrar con él, pero quien nos abre la puerta (sea quien sea) nos ayuda mucho a que la entrada sea lo menos "traumática" posible. (El año pasado Peque lloró todos los días al entrar en la guardería, ahora llevamos más de una semana sin llorar ¡¡yujuuuu!!)
    Ya nos hemos reunido una vez todos los padres, y nos han contado tanto el planning diario como las actividades que van a realizar durante todo el primer trimestre.
    La implicación de los padres en la escuela es mucho mayor (el año pasado lo único "extraordinario" que hicieron fue ir un día de carnavales disfrazados, sólo el que quisiera). Cada vez que llamo hablan conmigo, además mantenemos contacto semanal por correo y facebook. También tenemos una agenda donde apuntan lo más importante de cada día.
    Sin duda, la comunicación es importantísima.
    Espero que el tema mejore y que logres la comunicación que necesitas.

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    1. Irene qué gozada encontrar una escuela donde os sintáis cómodos y donde podáis participar más. La participación de las familias es super importante y eso facilita el trabajo de los educadores, y que los niños y niñas se sientan mucho mejor. Así que Irene me alegro de que ahora puedas disfrutar de ello. Un besote amiga, que siempre estás ahí.

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  4. Hola Pilar,

    Por lo que comentas parece que no tienes comunicacion con los educadores, deberias preguntar al resto de padres si esto sucede, quizas has roto el vinculo de confianza con ellos por alguna razon y no estas siendo entendida. Una de las bases de la comunicacion de forma principal es la confianza y si no la generas no existe comunicacion clara. En esta epoca de crisis y recortes existen problemas en todas las empresas y mucha gente tiene inseguridades sin trabajo. Intenta sacar la mejor actitud positiva que puedas y da la vuelta a la tortilla, veras como todo cambia. Animo !!!

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