Me siento indefensa, rabiosa, enfadada, decepcionada pero lo peor de todo siento mucho miedo.
Como ya os fui contando la escuela de Lola, que siendo pública siempre ha sido gestionada por una entidad privada, en este caso, una empresa de economía social, sin ánimo de lucro. Os juro, que nunca pensé que esto pudiera cambiar. Por desconocimiento y desinformación mia, no sabía que existieran escuelas infantiles "públicas" de gestión indirecta, siempre pensé que estaban gestionadas por funcionarios públicos. En cualquier caso, Lola y nosotros disfrutamos de dos cursos con esa cooperativa cuyo proyecto educativo funcionaba a la perfección y hacía que Lola fuera cada vez más segura de sí misma. En esta escuela conocí el concepto de educación y no de guardería.
La escuela ha cambiado de manos, han cambiado a una empresa enorme, que gestiona otras 11 escuelas, lo que significa que sí buscan un lucro con la educación de nuestros hijos y que además en el concurso hicieron una bajada del 20% en el presupuesto y que con esa bajada han resultado ganadores. Que además el contrato es por un año, que eso significa que el bebé que entre en esta escuela, tendrá 3 proyectos educativos diferentes y que para que se entienda es como si tu cambias a tu hijo de colegio 3 veces en 3 años. Cosa que me parece increíble y me llena de rabia y me parece totalmente injusto para los bebés, niños y niñas y sus familias.
¿Cómo hemos empezado? Pues sinceramente disgustados, llegamos a la escuela el día 3 de este mes, nos hicieron una presentación del nuevo equipo, que de momento no es equipo porque cada educador va a su aire. Lo más llamativo de todo, es que la escuela está literalmente vacía, las aulas no tienen elementos educativos. La explicación de la directora, es que no habían encontrado la dotación municipal en la escuela, y por eso las aulas tenían como mucho 4 juguetes, pero así, 1,2,3 y 4. Osea que imaginaros que cara teníamos las familias.
El día de la presentación, empezamos con mal pie, la educadora trataba de explicarnos cómo iba a ser el período de adaptación y nos trataba de explicar que dejábamos a los niños solos durante una hora el primer día, dos horas el segundo y así hasta llegar a completar la jornada. Los cursos anteriores, los padres y madres podíamos estar en esos períodos, acompañando a nuestros hijos. Mi marido y yo decidimos hacer un poco lo que nos diera la gana, por el bien de Lola y el nuestro.
Como las aulas estaban vacías, los padres decidimos llevar juguetes, pero claro ahora están llenos de juguetes que los padres con la mejor de sus intenciones han llevado y no son muy adecuados a la edad de nuestros hijos.
La situación nuestra, la de Lola, es que cada vez que la quiero dejar , me dice llorando pero un lloro que nunca había oído por su parte, que no se quiere quedar, que quiere irse a casa, y sinceramente yo lo vivo muy mal. Tan mal que hoy que era el día de dejarla más tiempo, resulta que me la he tenido que traer a casa.
Estoy super preocupada, además de que soy parte del AMPA, y que muchos padres me comentan su disconformidad con esta situación, con lo vacío de la escuela y la falta de coordinación. Me siento sola con Lola, porque mi marido este mes y el siguiente va a trabajar de sol a sol. Y me siento sola e incomprendida. He hablado con la responsable de educación del distrito y sus respuestas no me tranquilizan, nos piden tiempo pero realmente creo que si la empresa ha llegado tarde, no es nuestros problema, ni el de nuestros hijos.
Así que me siento triste, con mucho miedo de dejar a Lola, y bueno no sé cómo gestionar mis emociones, ni cómo llevar esta situación.
Desde que soy madre, el miedo ha aparecido, pero os puedo decir, que esta situación, la estoy viviendo de una manera muy angustiosa y con mucho miedo.
Uff la verdad es que entiendo como te sientes...esa angustia... ya se que es dif´cil acoplarse a esta nueva situación, pero intenta respirar hondo, y da un voto de confianza a la responsable de educación del distrito, a ver si mejora la cosa, y se van poniendo al día. Puede que Lola, no llore porque esté mal ahí, a lo mjero es que después de las vacaciones, de estar tanmto tiempo jutnas , le cueste un poquito adaptarse, y si ve caras nuevas le costará un poquito más.
ResponderEliminarNo se si algo te ayudarán mis palabras, intenta ver las cosas desde otro punto de vista, observa la situación, pero no te fustres, a veces nos cuesta adaptarnos a los cambios. Mucho ánimo y muchos besos.
tengo que tomarme esto con filosofia porque sino me va a dar algo. A ver si os voy contando mejores noticias, muchas gracias Raquel, de verdad, un besote
EliminarMadre mía, no sabía que esto pudiera ocurrir.
ResponderEliminar¿Y no la puedes cambiar?
17+2
Pues no no la podemos cambiar porque en el distrito solo hay una publica, que es lo que podemos pagar, y ya se pasó el plazo hace meses de echar solicitudes. Si es que la movida, es que hasta que no hemos llegado de vacaciones el día 1 de septiembre no hemos sabido qué empresa nueva va a estar, y te digo que de momento no sabemos el proyecto educativo que tienen. gracias por escribirme tu comentario. Muchas gracias
Eliminaray, pilar, no tengo nada que decirte más que que entiendo perfectamente cómo te sientes y que comparto tu preocupación.
ResponderEliminarno sé cómo, cuando hace tres años empezamos con la marea verde, cuando empezaron a desmantelar la educación pública a marchas forzadas, no se nos sumó la sociedad entera. yo me desengañé, nadie hizo piña fuera de las aulas.
lo que han hecho con las nubes no tiene nombre. es trágico y muy triste para todos, para vosotros, las familias y los niños :(
espero que pronto podáis encontrar una solución (¿media jornada en otra escuela quizá?). yo el otro día hablaba con una vecina que por qué no nos organizamos a turnos y cuidamos de nuestros niños todas. yo le decía "me quedo con tu nena y con víctor por la mañana y luego por la tarde, cuando yo trabajo, te los quedas tú un rato". se lo decía en broma pero ahora hasta me parece una opción razonable...
un beso
Pues esta opción que me dices, tampoco la descarto, pero de momento seguiré intentándolo a ver qué pasa. Aunque sigo con mucho miedo Bego. Hablamos y nos contamos guapa. Que tu tampoco lo estás pasando muy bien. Un besito
EliminarSabes que el tema me preocupa, pero ahora lo que quiero es darte ánimos.
ResponderEliminarEspero que pronto la cosa mejore y que tu hija se quiera quedar en la guardería. A Peque no le gusta nada ir, y llora cada día (es lo que hacía el año pasado y este año, que le hemos cambiado de guardería, imagino que hará lo mismo). Lo que intento pensar es que a mí me pasó igual, pero lo sé sólo porque me lo cuenta mi madre, porque yo no recuerdo nada y no tengo ningún trauma al respecto.
Lo siento guapa, no sé qué otra cosa decirte.
Espero que pronto escribas contándonos mejores noticias.